A la memoria de Azucena Villaflor
El pañuelo gritaba
una fecha y una ausencia.
El recuerdo de la muerte
emergió.
La angustia y el asombro
se adueñaron
de los ojos inexpertos
ante el roble sabio y silencioso
ante una mujer
una madre
pero de PLAZA DE MAYO.
©Beatriz Iriart